Hija de Irene y Victor Laure, nació en Marsella en 1929; en 1967 se casó con Charles Danguy. Anne, su hija, tiene tres hijos. En 1978, la familia acogió a Say, una joven refugiada laosiana, como segunda hija. Sus cinco nietos, así como sus sobrinos y sobrinos nietos en Francia y en Brasil, permanecen siempre cerca de su corazón.
En 1947, acompañó a su madre a Caux con su hermano pequeño Claude. Enseguida se unió a los jóvenes entusiastas que soñaban con "rehacer el mundo". Mezclando el espíritu despreocupado mediterráneo con el rigor de los que crecieron durante los años de la guerra y vivieron de cerca la Resistencia, aprende a mirar a otros pueblos con claridad y compasión. En los años siguientes comienza a viajar por Italia y América Latina con espectáculos de Rearme Moral.
En 1967, respondiendo a una llamada de los interlocutores de la industria, llega a Lorena con su marido para promover el diálogo social en esta región, duramente golpeada por una crisis industrial tras otra. Su sonrisa, su capacidad de escucha y su compasión le abrieron las puertas de muchos hogares, desde los más modestos hasta los más acomodados. En el corazón de una Europa todavía dividida, participó activamente, junto con su marido, en las reuniones que fomentaban el acercamiento, especialmente con los alemanes.
Realizó su primer viaje a Leipzig en 1987. La encontramos en Croacia o Chipre en los años 90. Sus últimos viajes la llevaron, con el equipo de Lorena de Iniciativas de Cambio y el Diálogo de los Agricultores, a la India, Polonia e Inglaterra; ya sea en un paisaje o en una conversación, siempre veía lo invisible, como los brotes de trigo que observaba en medio de las ruinas de Beirut, para ella símbolos de esta vida en la que creía con todas sus fuerzas a pesar de las dificultades físicas
Hasta el último día, Juliette pudo recibir a sus visitantes con su mirada afectuosa. Al dar las gracias a las enfermeras del hospital de Thionville, descubrí que las había llamado "mis ángeles". Sus oraciones se dirigían últimamente a la nueva generación que sucedió a los "300 entusiastas" de la posguerra, pues sabía que su tarea sería tan apasionante como ardua.
Juliette Danguy falleció el 11 de noviembre de 2008 a primera hora de la mañana.
